Un ejercicio de fe




Aunque han pasado casi 48 horas de nuestra derrota en cuartos de final ante Serbia me cuesta hacer una única lectura de lo que entonces sucedió.

No sé si se puede juzgar una concentración de mes y medio y un trabajo de muchos años por lo ocurrido en cuarenta minutos. Más allá de la justicia o injusticia de este hecho, el deporte de élite es precisamente esto: trabajar y realizar sacrificios para intentar ser mejor que otro que también trabaja y realiza sacrificios siendo la única diferencia, muchas veces, el talento.

Y de talento estamos hablando, porque el triple de Teodosic no se puede definir de otra manera. Una mala decisión (debería haber atacado por velocidad a Garbajosa) ejecutada con precisión milimétrica. Una jugada más para la mitología balcánica. Teodosic comparte ya lugar de honor con Petrovic, Kukoc, Delibasic, Radja y demás dioses del baloncesto.

Si la rotación no fue la acertada, si la defensa estuvo mal planteada, si hubo falta de concentración en momentos decisivos o si la última jugada no fue la apropiada son ya anécdotas que muy pocos recordaremos cuando pasen los años. Si pasado un lustro nos piden que definamos con un breve titular la actuación de España en el Mundial de Turquía algunos se centrarían en la baja de Pau y Calderón, otros en la pobre actuación de Ricky o Marc en relación con lo que prometían y otros tantos en la mala gestión de Scariolo desde el banquillo.

Sin embargo, si Teodosic falla y ganamos en la prórroga, ¿hubiera cambiado el análisis? Probablemente sí y el trabajo hubiera sido el mismo, Pau y Calderón seguirían sin haber jugado y Scariolo habría realizado exactamente la misma labor.

Claro, me diréis, es que el resultado marca mucho y ahora aspiramos a ser quintos. Qué decepción cuando veníamos de jugar cuatro finales consecutivas. Bien, aceptemos el término decepción tal y como viene definido en el diccionario de la RAE, “pesar causado por un desengaño”, pero en mi opinión el desengaño no ha venido dado por una mala gestión, sino por unas expectativas demasiado altas. Lo difícil no es caer en cuartos de final de un Mundial ante una gran selección como es Serbia por una genialidad, lo difícil es jugar cuatro finales consecutivas de grandes campeonatos respondiendo a los máximos niveles de presión. Y qué poco se valora. Qué difícil es ganar cuando se supone que debes hacerlo.

Admito que este argumentario es cuanto menos confuso, pero tiene una razón de ser. Se trata de lanzar una bocanada de optimismo a una atmósfera cargada de comentarios apocalípticos. No creo en el fin de ciclo, en el cambio de entrenador ni tampoco en la dimisión del presidente de la FEB. Prefiero mantener la fe en quienes nos han convertido en referentes del baloncesto durante una década. Prefiero creer que era necesario caer para marcarnos nuevas cotas.

Corrimos el riesgo de morir de éxito, pero éste nos abandonó en el momento preciso. Ahora, tras mostrarnos mortales, hemos de cargar el tanque de ilusión para recuperarlo. Objetivo Oro en Londres 2012. Yo creo, ¿tú?

UN ABRAZO Y BUEN BALONCESTO PARA TODOS

5 comentarios:

Explorador dijo...

Totalmente de acuerdo, pasamos de la euforia a la depresión a unas velocidades... Lo que sí que creo que habría que modificar levemente son las giras de preparación, a todos nos gusta ver a la selección en casa y apoyarla, pero con todo a favor no parece que las impresiones sean del todo certeras. Quizá vendría bien jugar más partidos fuera, arbitrajes menos favorables, ambientes más hostiles, etc...

Un saludo.

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo contigo en casi todo: ¿Fin de ciclo? No lo creo. El fin de ciclo puede tener lugar en Argentina (no parece haber relevo para esa generación tan genial y además sí parece, por edad al menos, que el fin de esa selección está al llegar). Pero España todavía es joven y tiene relevo.

En lo que no estoy de acuerdo contigo es con el debate sobre el entrenador. El análisis no debe centrarse únicamente en si nos han eliminado o no. El mundial no ha sido bueno, se han perdido partidos que no se deberían haber perdido y se ha jugado mal en muchos momentos (igual que el Europeo anterior, hasta cuartos). Entonces, si con otros entrenadores y un equipo parecido, se ganaba casi siempre, y se jugaba muy bien, arrasando, ¿qué ha cambiado? El entrenador, que en mi opinión y como diría Andrés Montes, es un poquito “encefalograma plano”.

Dani Legend

Tòfol Ferriol dijo...

Bueno, yo tampoco creo que sea un fin de ciclo, almenos general, porque para algunos, si que deberia ser el último torneo con la selección, ya que ellos si que tienen su relevo en condiciones de dar el salto, aunque, creo, que al 95% de la selección le quedan muy buenos años de basket.
Fracaso? para mi el fracaso no es haber caido en cuartos, porque Serbia nos ganó en todos los apartados posibles, para quitarse el sombrero. Para mi, el fracaso es no haber quedado priemras de grupo de manera indiscutible, i cruzarnos con USA en semis, que debia ser lo mas logico, ganasemos o perdieramos. El fracaso es el no haber demostrado que tenemos mas cojones que nadie, que si se tiene que ser duro se es duro, que si se tiene que sacrificar una vaca sagrada, que no da lo necesario se le quita, que no hayamos mordido en ningun partido, i el fracaso, de no saber cerrar un partido cuando vas ganando de 18 o 20 puntos de diferencia i terminas perdiendo, eso para mi es un fracaso absoluto. Dicen que el grupo sigue unido, etc, no lo dudo, pero que no son los cabraslocas de antes, que te macahcaban en 5 minutos, i luego poco a poco te remataban, ese grupo, no es el mismo que he visto yo este mundial. Pero bueno, es lo que hay. de quien es la culpa? pues no se que decir, casi nadie ha estado a la altura de lo que su papel le requeria, pero confio en que se sienten, hable, saquen conclusiones i cambien, si se consigue, no habra sido un fracaso absoluto, si se vuelve a repetir, ya volveremos ha hablar.
Un abrazo para todos.

UnKasZ dijo...

yo no se cómo lo veis, pero independientemente de todas las cosas que decis como que si scariolo, defensa, cojones y blablabla, creo que hace falta una regeneración en la selección. No se si eso tiene nombre como Claver, Suárez, San Emeterio...pero algo tiene que "aparecer".

Yo el año que viene al Europeo me cargaría a Navarro ( que descanse y que no se raye y que coja con fuerzas las olimpiadas) y varios más con el objetivo de llevar una selección "B" con el objetivo de que algunos jugadores den un salto de calidad véase Claver, Suárez, Mirotic, Aguilar, Franch....no se algo de este estilo. Necesitamos esos "3" de 2 metros 5 para competir con la savia nueva serbia, turca o rusa por ejemplo.

saludos

Anónimo dijo...

Yo sí estoy por un cambio de seleccionador. Necesitamos alguien que represente un nuevo compromiso. Me explico, el espíritu de Saitama, de Pepu, de lo haremos por Pau ya está amortizado. Hay que renovar el pacto del vestuario para que vuelvan las victorias. La regeneración está bien, pero lo primero es el compromiso. Saludos,

NCAA fan

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